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Los Bonos recurrentes forzarán a un overbooking en la línea del AVE gallego (compartir)

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Los Bonos recurrentes forzarán a un overbooking en la línea del AVE gallego
La estación de Ourense puede acoger dos trenes AVE pero no una doble composición.
Si la apertura, a partir del próximo 13 de septiembre, de la línea directa de AVE entre Ourense y Alicante sin ampliar el número de trenes va a suponer una merma en las plazas destinadas en ese tren entre Ourense y Madrid, la oferta de bonos AVE para usuarios recurrentes podría llegar a provocar una situación de overbooking, es decir, de vender más billetes que plazas hay disponibles en los cuatro trenes de alta velocidad que cada día circulan entre las estaciones de Chamartín y Ourense.

El sistema de venta de Renfe no permite el overbooking, ya que los asientos se adjudican en el momento de la adquisición de cada billete, a diferencia de lo que sucede en los aviones, donde sí es posible que se dé esa circunstancia. Sin embargo, la oferta de los bonos recurrentes, con un considerable descuento, puede atraer a un público usuario que hasta ahora no utilizaba los trenes de alta velocidad de la línea gallega, por ejemplo, para conectar Ourense y Zamora y de manera mucho más activa, entre Madrid y Zamora.

El bono AVE ofrece diez billetes por ochenta euros entre las estaciones de Chamartín-Clara Campoamor y Zamora, sin restricción alguna. Es decir, que tanto puede ser para usuarios que adquieren esos bonos por razones laborales, estudiantes o con fines turísticos, aprovechando la posibilidad de hacer cada viaje entre ambas ciudades por ocho euros, disponiendo de cuatro meses para hacer cinco viajes de ida y vuelta entre las mismas. Por poco más de ocho euros, el mismo tren permite comunicar Ourense y Zamora, dos ciudades que sin duda van a promover sus activos turísticos en el próximo otoño al amparo de esta facilidad para viajar entre una y otra.

Sin embargo, el bono AVE tiene un inconveniente. En el momento de adquirirlo no se adquiere la reserva de asiento, que solamente se produce en el momento de formalizar el viaje. Esto puede dar lugar a que la expectativa de un viaje se vea frustrada por la circunstancia de que los trenes ya tengan todas sus plazas vendidas con antelación, algo que sucede de manera habitual en períodos de alta ocupación, como son las fiestas de San Martiño en Ourense y los desplazamientos durante el puente de la Constitución y las vacaciones de Navidad.

En sentido contrario, si los titulares de los bonos formalizan con suficiente antelación sus viajes, serán los usuarios del tren entre Ourense y Madrid los que verán mermadas las plazas existentes y ello redundará en la elevación del precio de los billetes, dado que el régimen tarifario se basa en criterios de oferta y demanda, de manera que los últimos billetes disponibles siempre son los más caros para el viajero.

Falta de refuerzo

Dado que a día de hoy la tasa de ocupación de los trenes de la línea de alta velocidad ya es superior al ochenta por ciento, el margen para aumentar la demanda es muy estrecho y Renfe no dispone de trenes para asegurar con refuerzo de trenes dobles composiciones que incrementen las plazas. Se podría producir en fechas puntuales, cuando la demanda no es compartida con el resto de la red, como sucedió en el puente del Día das Letras Galegas y podría ocurrir, por ejemplo para el San Martiño, si hubiese una gran concurrencia de viajeros. Pero no durante Navidades y otras fechas en las que la demanda crece hacia todos los destinos. Por otra parte, en el AVE, se da la circunstancia de que Ourense no tiene espacio en su estación para acoger dobles composiciones de trenes AVE, ya que en la reforma realizada, con carácter provisional no contemplaba más que trenes de 200 metros de longitud y una doble composición necesita de algo más de cuatrocientos.