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Adif ha descartado el montaje de un ascensor en la estación Porta de Galicia, a pesar de la demanda de viajeros que encuentran incómoda la larguísima rampa por la que tienen que acceder al nivel superior en el que se sitúa el andén de acceso a los trenes y la ausencia de escaleras mecánicas. Sobre el plano se había contemplado ese equipamiento y, de hecho, el edificio cuenta con hueco para ascensor. Se trata de un coste adicional inferior a setenta mil euros, una nimiedad, comparado a los casi cuatro millones que costó el edificio. Porta de Galicia, de A Gudiña y Sanabria AV de Otero de Sanabria están a distinto nivel que las vías del tren y en ambas los viajeros tienen que armarse de paciencia y músculo, para recorrer arrastrando equipajes unas largas rampas, en el caso de Sanabria, a la intemperie, lo que resulta un problema tanto en días de sol agobiador como en heladas jornadas de invierno, circunstancias muy comunes en esa localidad.
A Gudiña cuenta con cuatro trenes diarios por sentido que comunican la estación Porta de Galicia con Madrid y Ourense, además de otras ciudades gallegas, como Vigo, Pontevedra, Ferrol, A Coruña, Santiago y Lugo. Sin embargo es la villa más maltratada por las empresas ferroviarias, ya que, además de carecer de ascensor en su estación, sus usuarios no pueden beneficiarse de los billetes en régimen de obligación de servicio público, como sí lo hacen otros, a bordo del mismo tren, para viajar entre Lugo y Sarria o Lugo y Monforte de Lemos a precio de tren regional. Para A Gudiña, que tiene en estos cuatro trenes la única comunicación con la capital de su provincia, no existe tal beneficio.