GOU! Ourense 2018 Alta Velocidade

Para que un tren cause un incendio tienen que conjugarse varias causas fortuitas. La primera de ellas, la existencia de vegetación seca en la vía o su entorno. Las lluvias de la primavera, que este año se están produciendo en una fase muy tardía, unidas a las altas temperaturas, activan el crecimiento de la vegetación de una manera más acentuada. Adif, que es la responsable de la infraestructura, ha puesto en marcha, además de las habituales rutinas que suponen, por ejemplo, el paso del tren herbicida para evitar el crecimiento de hierba y maleza en la vía y sus flancos, está desarrollando un plan de desbroce en los caminos de acceso y terrenos de servidumbre ferroviaria. El administrador ferroviario dispone de un centro operativo para la prevención de incendios de manera especial en el período estival, el Centro de Gestión de Red H24, que trabaja en coordinación con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), de manera que en función de las condiciones climáticas y las previsiones y avisos de AEMET implementan medidas adicionales si son necesarias, en determinados tramos de los más de 15.000 kilómetros de red ferroviaria española.

En el caso de las operadoras ferroviarias, los riesgos que se derivan de su actividad tienen que ver con el estado de mantenimiento de sus trenes. En los trenes y locomotoras con motores de combustión, se revisa el estado de los mismos y de los filtros que evitan la salida de partículas incandescentes por los tubos de escape y chimeneas. En el caso de los trenes eléctricos es el pantógrafo, el elemento que entra en contacto con la catenaria para tomar la corriente, el punto generador de posibles chispas. Si no hay vegetación seca en el entorno, o ramas de árboles que invaden el espacio ferroviario, esas chispas, que tienen un alcance reducido, suponen un riesgo mínimo.

En el caso de las composiciones mercantes, se produce un riesgo adicional cuando se registra el bloqueo de una zapata de freno en un vagón. La fricción no solo causa chispas sino también un incremento de la temperatura de las piezas que puede ser otra de las causas de ignición si hay materia vegetal en el entorno. Además de las labores de mantenimiento de las propias operadoras, Adif cuenta con un sistema de detectores de temperatura de los ejes de los trenes y de las cajas de grasa que permite advertir desde los centros de regulación y control de tráfico a los maquinistas de esa contingencia.

El plan de prevención de incendios en las líneas ferroviarias mantiene coordinadas las acciones tanto de los operadores como del administrador ferroviario y los equipos y efectivos de protección civil.