La reforma de la estación de León reducirá el tiempo de viaje entre Galicia y Barcelona y el País Vasco - Noticias

La reforma de la estación de León reducirá el tiempo de viaje entre Galicia y Barcelona y el País Vasco (compartir)

22-09-2021 Todo Noticias

Nuevas vías pasantes con un andén central de 410 metros en la estación de León.

La presidenta del Adif, María Luisa Domínguez inauguró ayer las nuevas instalaciones de la estación de León, con dos vías pasantes de ancho ibérico, que ponen fin a la pesadilla de una estación en fondo de saco en uno de los nudos ferroviarios más importantes de España. Los trenes con origen y destino Asturias y Galicia ya no tendrán que invertir la marcha para salir de la estación y regresar al trazado de su trayecto, como sucedía desde que se implantó una solución provisional que convirtió la tradicional estación pasante de León, con salidas a Galicia por Monforte, Asturias, Barcelona y Valladolid, en una estación término. Toda una contradicción cuando León nunca fue término de ninguna línea ferroviaria de ancho ibérico.

La nueva solución, cuyo presupuesto se acerca a los cincuenta millones de euros, permitirá a los trenes gallegos seguir su ruta y reducir el tiempo de viaje en casi veinte minutos, con respecto a la situación que se vivía hasta ayer. No obstante, esta ventaja, que hace dos años habría beneficiado a cuatro trenes diarios por sentido, actualmente solo acortará el tiempo de viaje al único tren gallego que tiene parada en León, que es el diurno a Barcelona.

El mismo tren sirve también de enlace para los viajeros que circulan en dirección al País Vasco, con transbordo en la estación de Miranda de Ebro para los usuarios que viajan a Bilbao y en Vitoria para los que tienen su destino en San Sebastián, Irún o Hendaya.

El viaje de Ourense a Barcelona, que actualmente dura 12 horas y 19 minutos podría ver reducido su tiempo a medio día justo. Renfe, sin embargo ya ofrece viajes con escala en Madrid y transbordo a un AVE Madrid-Barcelona en los que se invierten poco más de ocho horas y media, aunque con el inconveniente de tener que cambiar de estación para coger el AVE e ir en un tren de cercanías desde Chamartín a Atocha.