Adjudicado el suministro de balasto y traviesas para mejorar la línea entre Ourense y Lugo (compartir)
Todo Noticias
La semana pasada, por otra parte, fueron adjudicados los suministros de balasto, traviesas y aparatos de vía, por un importe de 37,3 millones de euros, para proceder a la renovación de dichos elementos. Salvo en el caso de los aparatos de vía, que serán fabricados en el País Vasco por la compañía alavesa Jez, el resto de los suministros serán proporcionados por empresas gallegas. El balasto, por canteras situadas en Melide, Silleda y O Barco de Valdeorras, y las traviesas por una unión temporal de empresas en la que participa la leonesa Traviesas del Norte y Luso Galaica de Traviesas, una de las filiales del grupo Copasa, con sede en O Carballiño. Tanto las canteras como los fabricantes de traviesas son habituales proveedores no solo en las líneas de ancho convencional, sino también en las líneas de alta velocidad.
Renovar la vía entre Ourense y Lugo representa cambiar casi 190.000 traviesas. Las que se van a implantar son monobloque y polivalentes. Las actuales también son monobloque, pero desde la década de 1990, por acuerdo del Consejo de Ministros, entonces presidido por Felipe González se tomó la decisión de que en adelante toda renovación de vía que se produjese en la red ferroviaria española se haría con traviesa polivalente, de manera que el paso del ancho ibérico al estándar europeo no supusiera un sobrecoste si en el futuro se determinaba el cambio de ancho en las líneas convencionales.
El último suministro que falta para completar este proceso es el de 115.118 toneladas de carril, que fue licitado el pasado mes de marzo y, previsiblemente será adjudicado en las próximas semanas.
La línea cuenta actualmente con otros contratos adicionales para la supresión de pasos a nivel y mejoras y reparación de puentes y actuaciones en trincheras.
El objetivo del Adif es transformar esta línea, trazada en el último cuarto del siglo XIX, en una vía de altas prestaciones, electrificada en su totalidad. No obstante, los proyectos más ambiciosos, como las variantes que permitirían elevar la velocidad media de los trenes están todavía en fase de proyecto.