Emplazamiento de la base de montaje en el PAET de Vilavella. (Foto Xesús Fariñas)
Cinco subtramos del trazado del AVE entre Pedralba de la Pradería y Taboadela están virtualmente finalizados, a falta de pequeños remates y el acondicionamiento para su integración ambiental. Lo mismo sucede con el ramal de Taboadela. Esos trabajos no serían incompatibles con el cumplimiento de los plazos para que el Adif tuviese finalizadas las obras si no en los últimos días de 2019 sí en las primeras semanas de 2020. Pero en la fase que sigue a la construcción de la infraestructura, que es el montaje de la vía y la línea aérea (la catenaria y todos los elementos que ello comporta como postes, etcétera) se observa un importante retraso en una pieza clave para su desarrollo. Se trata de la principal base de montaje, la que tiene su emplazamiento en A Mezquita. La obra, adjudicada en el consejo de administración del Adif el 28 de febrero de 2019 a la UTE formada por Ortiz y Cosfesa, del grupo Ortiz por 6,95 millones, tiene un plazo de ejecución de 11 meses que se cuentan desde el día en el que se firma el acta de replanteo de las obras. La base puede estar operativa incluso sin haber sido terminada, ya que hay elementos cuya finalidad está destinada a su posterior uso como base de mantenimiento.
Sin embargo, a día de hoy faltan todavía las piezas clave para su utilización como base de montaje: no está finalizada la losa ni instaladas las grúas pórtico que servirán para el manejo del carril de la vía; no están y todavía falta mucho para verlas, las 9 vías en dos peines desde las que se producirá el intercambio de carril desde la línea de ancho ibérico a la de alta velocidad. Tampoco la conexión de la línea de ancho convencional con la plataforma de la base de montaje, pieza imprescindible para que los trenes carrileros y el resto de los trenes que son necesarios para el desarrollo de las obras accedan a dicha base. En el tramo anterior, Zamora-Pedralba, el montaje de la vía y los posteriores trabajos necesarios, así como la instalación de los desvíos y demás elementos de vía, y catenaria llevó 9 meses desde que se inició el tendido del carril. Aunque el Adif espera necesitar la mitad de tiempo en el tramo gallego, porque los primeros kilómetros desde Pedralba hasta el PAET de Vilavella, donde están construyendo la base de montaje, son en vía única y porque cuenta con dos bases desde las que atacar los trabajos, lo cierto es que esos cuatro meses no podrán empezar hasta que las obras se encuentre lo suficientemente avanzada como para permitir su uso y a la vista de la situación actual, todavía le falta tiempo para disponer de sus instalaciones clave en el montaje de vía.
Otro de los aspectos en los que también hay un visible retraso es el referido al montaje del sistema de suministro eléctrico al tren. Es cierto que la catenaria es lo último que se tiende, cuando ya la vía está montada y ajustada. Pero los postes y demás elementos están sin colocar en la mayoría del trazado. En buena parte de la la traza están presentados en su punto de colocación o agrupados en pequeños grupos para ser desplazados hasta su punto de anclaje. La UTE formada por Elecnor y Electren fue la adjudicataria de este contrato en enero de 2019, con un plazo de ejecución de 22 meses, lo que sitúa el final de las obras en este campo entre los meses de octubre y diciembre de 2020, casi un año después de la fecha comprometida por Fomento para la terminación de las obras e inicio de las primeras pruebas.