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Las obras de la estación intermodal de Ourense no finalizarán hasta 2024 (compartir)

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Las obras de la estación intermodal de Ourense no finalizarán hasta 2024
Los primeros trenes de alta velocidad que lleguen a Ourense lo harán a una estación en obras, situación que se prolongará durante los dos o tres años siguientes, hasta 2024. De los ocho contratos en los que ha sido fraccionada la futura estación intermodal, cinco están todavía pendientes de licitar y entre ellos el que tiene un plazo de ejecución más largo: el edificio y la pasarela peatonal, con un presupuesto de 66,9 millones de euros y un plazo de ejecución previsto de 44 meses. El delegado del Gobierno en Galicia anunció, hace quince días, que dicho contrato estaría licitado en el segundo semestre del año actual, para poder comenzar a lo largo de 2020.

Ese “a lo largo de 2020”, puede significar que no esté concluida hasta el año 2024. Todo va a depender de que la licitación se resuelva o no antes de este otoño. Desde que se procede a la licitación hasta que las obras son adjudicadas transcurre un plazo que oscila entre los 4 y los 6 meses, dependiendo del número de licitantes y de la complejidad con la que haya que resolver la adjudicación del contrato. Pero el plazo de ejecución no comienza a contar hasta que se firma el acta de replanteo, que es cuando físicamente los obreros y la maquinaria se ponen a trabajar sobre el terreno y eso suele ocurrir entre uno y dos meses después de la adjudicación, ya que existen otros trámites intermedios, como por ejemplo, la firma del contrato.

Las obras pendientes de licitar están repartidas en cinco contratos que suman un total de 105,9 millones de euros y su ejecución se solapa, de manera que si no están avanzados unos, no pueden comenzar otros. Esa coordinación puede ocasionar una demora a los 44 meses inicialmente previstos y, en cualquier caso, el edificio y la pasarela que unirá ambos barrios de A Ponte, actualmente fracturados por la playa de vías de la estación, no podrá estar concluido, como mínimo hasta finales de 2023, aunque lo más probable es que sea en los primeros meses de 2024.

Además de ese contrato principal, hay otros cuatro pendientes de licitar, vinculados a la urbanización e integración urbana de la nueva infraestructura y su ejecución debe seguir una secuencia lógica de tramitación porque unos dependen de otros. 

Así, el primero de ellos, además del edificio principal, es el cubrimiento de la playa de vías, con un plazo de ejecución de 18 meses y un presupuesto de 11,4 millones de euros. Se necesitan otros 18 meses para la urbanización de ese cubrimiento, y un presupuesto de 6,1 millones. A continuación, otros 18 meses para el cubrimiento adicional de la playa de vías y su urbanización, con 9,9 millones de euros  presupuestados, y por último, el vial de conexión para vehículos entre ambos barrios, con un plazo de 24 meses y 11,6 millones. La tramitación y ejecución del edificio y pasarela y las obras complementarias destinadas a la urbanización e integración de las instalaciones ferroviarias necesitan entre 50 meses la infraestructura y entre 50 y 60 meses el resto, ello va a depender de la secuencia de realización de las mismas.

Las obras pendientes de licitar en la estación  suman 105,9 millones de euros, de un total de 134,42. Los 28,5 millones restantes se corresponden con los tres contratos ya adjudicados: la estación de autobuses, que fue el primero, en mayo del año pasado, el parking subterráneo, que fue el último, en marzo de 2019 y la remodelación de la playa de vías y andenes, cuya adjudicación fue en junio de 2018 y que actualmente es el más avanzado de los tres, cuya finalización está prevista para después del verano. Parking y estación de autobuses parecen dos obras paradas, pero en realidad no lo están. En la primera se acometió la liberación del espacio donde se emplazará, mediante el derribo de edificios como el supermercado y otros elementos. Pero esa superficie va a ser utilizada por Adif como estacionamiento provisional  al que se desplazará el actual en la plaza que hay delante del ala oeste de la estación, mientras se realizan las obras del parking subterráneo.

Tanto el Adif como Xunta, que son las dos instituciones implicadas en esos dos contratos, confían en que ambas obras estén concluidas antes de la llegada de los primeros trenes de alta velocidad a la estación de Ourense. En el caso del estacionamiento, el plazo de ejecución previsto es de doce meses que comenzaron a contar hace apenas unas semanas lo que sitúa su finalización en el verano de 2020. La llegada de los primeros trenes en servicio comercial podrían llegar entre los últimos días de 2020 y primeros de 2022. Dependerá de que se mantenga el ritmo actual de las obras y que la duración del período de pruebas sea de menos de un año, y no como en el caso de Granada, cuya línea estuvo casi año y medio con la fase de evaluación.


Problemas de coordinación en las obras de la estación


Las obras en vías y andenes garantizarán la explotación compatible de trenes de ancho ibérico y ancho estándar. Ese es su objetivo, pero el propio pliego define las obras como una serie de actuaciones de mínimos. Esto se traduce en que la siguiente fase de las obras requerirá  nuevas acciones para encajarse con lo ya hecho.Lo cierto es que la falta de coordinación ya se ha visto en la secuencia de trabajo en el exterior de la estación. Mientras la estación de autobuses era adjudicada en mayo de 2018, cuya construcción está condicionada a la evolución de las obras del parking subterráneo, éste en cambio no era adjudicado hasta diez meses más tarde. Bien es cierto que para que las obras del parking comenzasen, tendría que estar primero liberada la superficie ocupada por almacenes y servicios cuya demolición formaba parte del contrato de la construcción de la estación de autobuses. Pero diez meses se convirtieron en un margen excesivo que no ha hecho más que retrasar el conjunto..