El AVE a Ourense está a doscientos días (compartir)
Todo NoticiasUnas condiciones climáticas favorables y el ritmo incesante tanto de las obras como de la tramitación de los últimos contratos que estaban pendientes han favorecido el cumplimiento de los objetivos hasta la fecha, incluso adelantando algunos de los pronósticos, como es el caso del tramo más complejo de la línea pese a su cortísima longitud, entre Portocamba y Cerdedelo, con los viaductos de As Teixeiras como principal obstáculo. En este subtramo, de 2,3 kilómetros la previsión era finalizar el primero de los viaductos este mes de junio y el segundo, a lo largo del segundo semestre de 2019. Sin embargo, el primero de los viaductos, el correspondiente a la vía derecha está finalizado desde el pasado mes de marzo y se espera que el segundo quede finiquitado antes de terminar junio, con lo que, con toda probabilidad los trabajos en este subtramo se concluyan a lo largo de las primeras semanas del verano.
Todos los grandes túneles están ya terminados, desde el de la vía derecha del Padornelo hasta O Corno en ambas vías, ya que todos discurren con plataforma independiente en vía derecha e izquierda, y conectados con galerías cada cuatrocientos metros.
El único subtramo en el que todavía hay parte de la vía derecha sin finalizar es el primero de todos, entre Pedralba y el Túnel del Padornelo, en el que los primeros cinco kilómetros son de plataforma de vía doble y llegan hasta la boca misma de los túneles de Requejo y luego sigue por la vía izquierda hasta la boca del túnel del Padornelo de la línea convencional, que compartirá su uso actual de la antigua línea de Zamora a Ourense, con el de la vía izquierda de la nueva línea de alta velocidad.
Montaje de vía y catenaria
Con los tiempos de ejecución de la infraestructura más o menos ajustados y la posibilidad de iniciar el montaje de la vía y de los elementos de la catenaria sin que toda la línea esté finalizada en la parte de la plataforma, existen, sin embargo, algunos flecos que podrían quedar para los primeros meses de 2020, debido a retrasos en las adjudicaciones de contratos de la parte concerniente a la superestructura, es decir, lo que se refiere al montaje de la vía y de todos los elementos relativos a la instalación del tendido eléctrico, ya que hay contratos cuya plazo de finalización no se prevé hasta bien entrado el año próximo y a que en toda obra, sobre todo de la magnitud de esta línea ferroviaria, existen imponderables contra los que no se pueden establecer previsiones.
En cualquier caso, esos posibles retrasos podrían no afectar al compromiso de entrada en servicio de la línea, señalada sin día concreto, para 2020.
Zamora Pedralba:
La gran incógnita a día de hoy es la fecha de inauguración del tramo ya concluido entre Zamora y Pedralba de la Pradería, que está en pruebas desde los últimos días del pasado mes de enero. Ahí ya no es el Adif quien marca los plazos, sino la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria, que es la que tiene que dar el visto bueno tras la finalización de todas las pruebas, incluida la del sistema ERTMS, y la propia Renfe, que luego tiene que asegurar las pruebas de circulación de los trenes comerciales y la formación a los maquinistas, dos trámites de escasa complejidad ya que tanto los trenes como los maquinistas serán los mismos que están realizando actualmente los servicios diurnos entre las ciudades gallegas y Madrid.