El AVE llegará en Avril y en 2020 (compartir)
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Ávalos recordó, eso sí, que el compromiso de tener las obras finalizadas no significa que la entrada en servicio de esos tramos sea inminente, ya que dependerá del período de pruebas que siga a continuación y que puede prolongarse hasta seis o más meses, por lo que estima que los trenes gallegos comenzarán a viajar por el nuevo tramo hasta Pedralba a lo largo de 2019 y que los primeros trenes AVE llegarán a Ourense en el curso de 2020, sin comprometerse a una fecha concreta.
Lo que sí ha dado son pistas sobre el tiempo que acortará el viaje de los trenes gallegos cada uno de los nuevos tramos que entren en servicio: para el caso del Zamora-Pedralba, supondrá un ahorro de 57 minutos, una vez que esté en funcionamiento el ERTMS desde Olmedo y los trenes ya circulen a una velocidad máxima de 250 kilómetros por hora.
Para la segunda fase, en 2020, el ahorro será de 1 hora y 15 minutos más. En el nuevo escenario, los trenes diurnos gallegos seguirán siendo los Alvia 730, los híbridos, hasta que esté operativo todo el trazado entre Zamora y Taboadela, el cambiador de ancho de Taboadela y la línea adaptada para uso mixto de ancho convencional y ancho estándar entre Taboadela y la estación de Ourense. En ese momento, los trenes que circularán entre Madrid y Galicia serán los AVRIL que está construyendo Talgo para Renfe Operadora y que prevé tener terminados en el año 2020. En el caso de que la línea esté concluida antes de que operen ya en servicio comercial dichos trenes, hasta Ourense podrán llegar los trenes AVE de cualquier otra serie que están circulando por otras líneas de alta velocidad, sin necesidad de pasar por el cambiador de ancho y haciendo de Ourense su estación término, y para el resto de las ciudades, utilizando o bien los Alvia 730 desde Madrid, o bien haciendo transbordo en Ourense.
La previsión de Ávalos, según sus declaraciones, es que el tren más rápido, con menos paradas intermedias, invierta 3 horas y media entre Madrid y Ourense, en vez de las 4 horas y 27 minutos actuales. El ahorro de tiempo será también trasladable al resto de las estaciones gallegas, con un tiempo de viaje de 4 horas 14 minutos a Santiago, en vez de las 5:07 actuales; 4:50 a Pontevedra y A Coruña, 5:02 a Lugo, 5:06 a Vigo y una hora más a Ferrol.
A Vigo y Pontevedra por Santiago
La ciudad más beneficiada con la entrada en servicio del nuevo tramo será Pontevedra, que ahorrará casi dos horas en el viaje. Esto se debe a que a partir de ese momento, el tren ya no seguirá desde Ourense a Vigo por la línea del Miño, sino que hará el viaje por Santiago, llegando así antes a Pontevedra que a Vigo y ahorrando la maniobra de inversión de marcha que tiene que hacer actualmente, desde la estación de Vigo para regresar a Redondela y entrar en el corredor atlántico desde Arcade.
Las estimaciones del ministro Ávalos se basan en los trenes con menos paradas comerciales intermedias, como son las que algunas circulaciones realizan en Segovia, Medina, Puebla de Sanabria y A Gudiña.