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La explicación de los técnicos de Fomento sobre el contrato de la electrificación también aplaza a 2020 el final de las obras (compartir)

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La explicación de los técnicos de Fomento sobre el contrato de la electrificación también aplaza a 2020 el final de las obras
Tras las reacciones habidas a la vista de los plazos de finalización de las obras que se deducen del pliego de condiciones del contrato de electrificación del tramo Pedralba de la Pradería-Ourense, técnicos del Ministerio de Fomento, en explicaciones dadas a las preguntas realizadas desde la Xunta, solo 14 de los 22 meses son necesarios para la conexión eléctrica efectiva entre Pedralba de la Pradería y la estación de Ourense, y los otros ocho meses restantes se prevén para trabajos complementarios y de mantenimiento que no impedirían la circulación de los trenes.

La reducción significativa de ocho meses al plazo necesario para que se produzca la conexión eléctrica entre Pedralba y Ourense minoraría sensiblemente el retraso que, sin embargo ya deja para enero o febrero de 2020 la finalización, aunque provisional, de las obras. De hecho, en el pliego de condiciones administrativas de dicho contrato no se contempla ninguna certificación de obras en 2018, y solo tiene consignaciones presupuestarias para el mismo en 2019 y 2020.

El montaje del hilo de contacto con el que se alimentan los trenes de energía eléctrica es el último eslabón en el desarrollo de las obras de la línea de alta velocidad. Los trabajos de electrificación se van realizando, sin embargo, con anterioridad, en lo que se refiere a la preparación de la plataforma para acoger los postes, el montaje de los mismos y el resto de los componentes del sistema de alimentación eléctrica, salvo el hilo de cobre que es la última incorporación y se finaliza pocos días antes de que la línea entre en tensión. Este esquema de montaje se lleva a cabo así porque para que los operarios puedan llevar a cabo el tendido de la catenaria tienen que haber finalizado todas las fases previas en lo que se refiere al montaje, amolado y perfilado de la vía férrea, ya que mientras se realizan estas operaciones el tramo queda bloqueado para el paso de trenes. Otra razón, no menos importante, son los frecuentes robos de cobre en las líneas en construcción, por lo que para evitar la oportunidad a los ladrones, se reduce al mínimo tiempo posible el período en el que dichos hilos están sin tensión.

Aunque los técnicos de Fomento no han especificado cuáles son esos flecos que ocuparán ocho meses del contrato, cabría la posibilidad de que diese prioridad a una de las vías desde As Teixeiras y se retrasase la ejecución de las obras en la electrificación de la segunda, habida cuenta de que el segundo viaducto de As Teixeiras no estará finalizado hasta después de la inauguración del servicio comercial de la línea.