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Los trenes de las series 130 y 730 con las que Renfe presta los servicios Alvia entre Galicia y Madrid y Galicia y Barcelona contarán con un nuevo sistema de navegación que servirá de refuerzo a los sistemas de señalización que ya poseen (ASFA digital, ERTMS…) y que añadirá un módulo de geolocalización alternativo.

La operadora ferroviaria ha licitado el suministro de estos sistemas para los 45 trenes de ambas series por un importe de 781.000 euros. La empresa que gane el concurso tendrá que suministrar dichos equipos en un plazo máximo de 12 meses una vez que se formalice el contrato.

Los Alvia de las series 130 cuentan ya con diez años de rodaje por las vías españolas. Son trenes que pueden alcanzar una velocidad máxima de 250 kilómetros por hora y disponen de sistema de rodadura variable para circular por vías de ancho ibérico y estándar internacional y bitensión para alimentarse con la catenaria convencional, a 3.000 voltios de corriente continua y con la de la red de alta velocidad a 25.000 voltios de corriente alterna. Dos unidades de la serie 130 se ocupan del servicio diurno de larga distancia entre Galicia y Barcelona.

De esta serie, que en principio contó con un número de 45 unidades, fue segregado un lote de 15 unidades que pasaron a convertirse en la serie 730. Para ello se les dotó de un equipo de generación diesel capaz de alimentar sus motores eléctricos cuando el tren circulase por líneas sin electrificar. La reforma fue realizada, específicamente, para mejorar los tiempos de viaje entre Madrid y Galicia, aprovechando los tramos de alta velocidad que en aquel momento ya estaban en servicio. Su primer viaje comercial tuvo lugar en junio de 2012, cuando ya estaban operativos los tramos Madrid-Olmedo y Ourense-Santiago. Conocidos también como los híbridos, los 730 cuentan con 262 plazas, frente a las 299 del 130. Dicha serie es la que sostiene todos los servicios diurnos entre Galicia y Madrid.